Fue una de las empresas mejor valoradas en el Investment Day del TecnoCampus y Economistas Ban que se celebró el pasado mes de julio en Mataró. En esta jornada pudieron presentar su proyecto y captaron el interés de varios inversores.

En un mundo amenazado por el cambio climático y las crisis alimentarias, la búsqueda de alternativas alimentarias sostenibles se ha convertido en una prioridad. Y en este campo parece que la producción de insectos comestibles va al alza, puesto que son una fuente de alimento con altas propiedades nutritivas y de bajo impacto ecológico y económico. 

Insectius es una granja biotecnológica de insectos, una empresa dedicada a producir proteína comestible procedente de gusanos de la harina criados siguiendo un modelo de producción circular "que se potencia con tecnología", según explica el CEO, Raul Reyes. Cuentan con una granja en Sant Iscle de Vallalta donde se crían los insectos que se destinarán a la producción de harinas para elaborar pienso y comida para animales.

Asimismo, han desarrollado su propio software de IA y robots de automatización para poder optimizar los procesos de cultivo, lo que los convierte en una "granja biotecnológica". Este sistema "nos permite ser más eficientes a la hora de producir animales, reduciendo de 6 minutos a 40 segundos el tiempo invertido en cada bandeja", explica Reyes, quien también destaca que mediante la IA también resulta más fácil y rápido detectar posibles plagas . 

Investment Day en el TecnoCampus

Insectius fue una de las empresas mejor valoradas en el Investment Day del TecnoCampus y Economistas Ban que se celebró el pasado mes de julio en Mataró. En esta jornada pudieron presentar su proyecto y captaron el interés de varios inversores, gracias a los cuales pudieron reunir 200.000 euros para seguir desarrollando el producto.

Con esta inversión, Insectius ha podido ampliar su actividad con el proceso de congelación, secado y estocado que prepara a los insectos para convertirlos en la harina que se utilizará para la elaboración del pienso. La empresa se dedica a producir un tipo de insecto llamado Tenebrio molitor, más conocido como el gusano de la harina, el primer insecto autorizado en Europa para consumo humano desde mayo de 2021. Es un organismo que ocupa un espacio mínimo y requiere agua escasa, lo que hace que su producción sea extremadamente sostenible y ofrezca una amplia gama de aplicaciones. Todas las fases del Tenebro se aprovechen, generando un impacto y residuos mínimos, ya que incluso sus heces se aprovechen como fertilizante orgánico natural. 

La proteína de insecto es una fuente de nutrientes ideal para animales monogástricos como cerdos y gallinas. Garantizan su bienestar y ganadería y agricultura ecológicas, orgánicas y biodinámicas. La empresa también produce proteína destinada a la alimentación de perros y gatos. Los piensos a base de este insecto proporcionan una alimentación hipoalergénica al ser una proteína novato, con un perfil de aminoácidos y grasas perfectas para las mascotas, y con mucho menor impacto medioambiental que los otros piensos.  


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